El pienso o alimento seco para perros es una opción popular por su comodidad y larga duración, pero varios estudios y expertos cuestionan sus efectos a largo plazo en la salud de los perros. A continuación, te explicamos de manera más detallada por qué el pienso puede no ser la mejor opción para tu mascota y qué alternativas existen.
1. El problema del proceso de fabricación
El pienso se elabora a través de un proceso industrial que somete los ingredientes a altas temperaturas (superiores a 160 ºC) para garantizar su forma, textura y larga conservación. Sin embargo, este proceso tiene varios efectos negativos:
- Formación de compuestos dañinos:
- Aminas heterocíclicas (HCA) y hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH): Se generan al cocinar proteínas y grasas a altas temperaturas. Estos compuestos han sido vinculados con mutaciones celulares y un mayor riesgo de cáncer.
- Productos avanzados de glicación (AGEs): Surgen cuando los azúcares reaccionan con las proteínas y grasas durante la cocción. Los AGEs pueden causar inflamación crónica y estrés oxidativo.
- Acrilamida: Un químico potencialmente cancerígeno que aparece cuando los carbohidratos se exponen a altas temperaturas.
- Grasas trans y oxidadas: Las grasas oxidadas contribuyen a la inflamación y problemas cardiovasculares, mientras que las grasas trans son consideradas dañinas tanto para humanos como para perros.
- Pérdida de nutrientes esenciales:
- Las altas temperaturas eliminan antioxidantes y enzimas naturales presentes en los ingredientes frescos, reduciendo la calidad nutricional del alimento.
- Esto obliga a los fabricantes a agregar suplementos sintéticos, que no siempre son tan efectivos ni fáciles de digerir.
2. Exceso de carbohidratos: el azúcar oculto
Aunque el pienso puede parecer equilibrado, gran parte de su composición proviene de carbohidratos como maíz, trigo, arroz, patatas y legumbres. Estos carbohidratos son necesarios para darle la consistencia sólida y crujiente característica del pienso, pero presentan problemas importantes:
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Altísimo contenido de carbohidratos: Muchos piensos contienen más del 50% de su peso en carbohidratos, que se convierten rápidamente en glucosa (azúcar) en el cuerpo del perro.
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Alimentan a las células cancerígenas:
- Las células cancerígenas consumen glucosa como fuente principal de energía, lo que fomenta su crecimiento y propagación.
- Esta conexión, conocida como el «efecto Warburg», explica cómo las dietas altas en azúcar pueden ser perjudiciales para perros con predisposición a desarrollar cáncer.
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Obesidad y otros problemas metabólicos:
- Los carbohidratos en exceso pueden llevar al aumento de peso, resistencia a la insulina y otros trastornos metabólicos que impactan negativamente la salud general de tu perro.
3. Inflamación crónica y el riesgo de cáncer
La inflamación es una respuesta natural del cuerpo ante lesiones o infecciones, pero cuando se vuelve crónica, puede tener efectos devastadores:
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Relación entre inflamación y cáncer:
- La inflamación constante genera radicales libres que dañan el ADN de las células, aumentando el riesgo de mutaciones y tumores.
- Además, altera el sistema inmunológico, dificultando la capacidad del cuerpo para combatir las células cancerígenas.
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Cánceres asociados con la inflamación crónica en perros:
- Osteosarcoma (cáncer de huesos): Más común en razas grandes y gigantes.
- Tumores de mastocitos: Un tipo de cáncer de piel relacionado con la liberación de compuestos inflamatorios.
- Hemangiosarcoma: Afecta los vasos sanguíneos y está relacionado con procesos inflamatorios en tejidos.
- Cáncer de vejiga: Inflamación recurrente en el tracto urinario aumenta el riesgo.
- Carcinoma oral: Irritación e inflamación crónica en la boca suelen estar relacionadas con este tipo de cáncer.
4. Alternativas más saludables al pienso
Si estás buscando mejorar la dieta de tu perro y reducir riesgos, aquí tienes opciones más naturales y saludables:
Dietas crudas:
- Ventajas:
- Conservan los nutrientes al no ser sometidas a altas temperaturas.
- Ingredientes frescos, como carne, huesos, frutas y verduras, ofrecen una nutrición más completa.
- Desventajas:
- Algunas marcas pueden incluir carbohidratos innecesarios o conservantes, por lo que es fundamental revisar las etiquetas o tener a un buen nutricionista canino.
Dieta casera cruda o cocida ligeramente
- Dieta cruda:
- Similar a lo que comerían en su entorno natural.
- Incluye carne, huesos, órganos, y cantidades controladas de frutas y verduras.
- Evita carbohidratos innecesarios, reduciendo el azúcar que alimenta las células cancerígenas.
- Dieta cocida ligeramente:
- Cocinar los alimentos a baja temperatura elimina bacterias sin perder nutrientes.
- Ideal para perros con sistemas inmunitarios debilitados o dueños preocupados por el manejo de alimentos crudos.
Dietas deshidratadas o aireadas
- Deshidratadas:
- Procesadas a bajas temperaturas para conservar nutrientes.
- Se rehidratan con agua o caldos, ofreciendo hidratación extra a tu perro.
- Aireadas:
- Mantienen algo de humedad y son fáciles de servir.
- Conservan un alto valor nutricional y suelen tener menos ingredientes artificiales
5. Beneficios de cambiar a una dieta fresca
- Menor riesgo de enfermedades:
- Al eliminar carbohidratos y compuestos nocivos, reduces las posibilidades de obesidad, inflamación y cáncer.
- Control total de los ingredientes:
- Puedes elegir alimentos frescos y de calidad.
- Mayor energía y bienestar:
- Las dietas frescas ofrecen nutrientes más biodisponibles, mejorando la salud general de tu perro.
Conclusión
El pienso es una opción práctica, pero su fabricación y composición pueden tener un impacto negativo en la salud de tu perro a largo plazo. Cambiar a una dieta más natural, basada en alimentos frescos y mínimamente procesados, puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de tu mascota. Proporcionar una alimentación adecuada no solo mejora su salud física, sino que también reduce significativamente los riesgos de enfermedades graves como el cáncer.
Nutricionista y Educadora Canina